dimarts, 19 d’octubre del 2010

Parques urbanos

El Parque de Collserola tiene una relación singular con la ciudad porque ha tenido bastante distancia del centro por permitir el desarrollo de real ecosistemas y al mismo es accesible del centro en poco tiempo, dominando el segundo plano barcelonés. Este dicotomía entre accesibilidad y distancia visual es el propio de este parque porque parece más lejos que lo es en realidad. Que sea la una limita de la ciudad y que sea protegido es una buena cosa para frenar el esparcimiento urbano y empujar la ciudad a replantearse, en vez de dejar cualquier cosa construirse. Al mismo, es un punto de observación privilegiado sobre Barcelona. Seguro que deba luchar para preservarse, pero es una gigante oasis de frescor que gana a ser conocida y disfrutada que pone la urbanidad en equilibrio con naturaleza.

E
n comparación, Montréal no tiene un único gigante espacio verde natural, pero muchos parques medios al rededor de su territorio. Como es también una isla, la función de limita es ocupada por los ríos rodeándola. Porque son divididos y mas urbanos, es también mas difícil de preservarlos de construcciones y polución y así mantener la fauna y flora. Sin embargo, el acceso es tan sencillo que son claramente incluidos en la vida cotidiana de la gente.